Una de tus obligaciones como dueño de un negocio es manejar a tus empleados y separarlos de tu empresa cuando sea necesario. Despedir a un colaborador nunca es agradable, pero es necesario para tener un negocio que crezca.
En lugar de dejar que los malos empleados se queden a arruinar tu compañía, debes estar vigilante a ciertas señales muy claras que te ayudarán a distinguir entre un trabajador que solo necesita ayuda y otro que ya no tiene lugar como parte de tu equipo.
1. No se comunica / no asiste
Como líder debes tener empatía. Si un empleado perdió a su mamá o papá en un accidente, lo último que se le va a ocurrir es llamar a su jefe. Sin embargo, si esto sucede más de una vez, debes ponerte a sospechar. Después de todo, el absentismo te cuesta dinero y tiempo porque el resto de tu equipo debe hacerse cargo de lo que queda desatendido.
Debes tener una política de faltas en tu negocio para que tu equipo sepa cómo manejar ausencias de último minuto. Comunica este protocolo a todos los miembros de tu negocio. Personalmente, yo le doy una advertencia a los empleados que por primera vez no van a la oficina y no llaman, pero si vuelve a pasar, se van. Sé que suena horrible, pero tengo un negocio que manejar uy no puedo permitir que una sola persona lo frene.
2. Tienen baja productividad
Para ser justos, hay momentos en las que la productividad de TODOS baja. A veces un proyecto es demasiado largo y pesado, pero eso no significa que los empleados estén “echando la flojera”. Simplemente demuestra que tienen demasiado trabajo.
Pero si hay un empleado en específico que constantemente te entrega trabajos después de su fecha límite, tienes que ponerles atención. Otras señales pueden incluir cometer muchos errores, siempre están pidiendo ayuda a los demás o te quitan demasiado tiempo. Pueden mostrar que la persona no tiene las habilidades necesarias para el puesto.
3. Busca problemas
Este individuo puede causar serios problemas en tu empresa si no le pones atención. Son los que propagan rumores, hacen que los compañeros se peleen, incitan motines y hablan mal de sus jefes. Si tienes un empleado que simplemente no quiere seguir las iniciativas de tu negocio, se queja de los proyectos y causa problemas entre el equipo, entonces lo mejor es dejarlo ir.
4. No saben manejar el cambio
“El cambio es inevitable, especialmente para una compañía en crecimiento. Los empleados deben sentirse cómodos con las transformaciones y animados a probar sus habilidades”, dice Matthew Bellows, CEO de .
Esto puede ser realmente difícil cuando tienes un empleado trabajador que ama la cultura de la empresa. Desafortunadamente ya no se está desempeñando en un buen nivel porque ya no se adapta a las nuevas formas de la empresa.
5. Te cuestiona TODO
Como líder es tu obligación preparar empleados con iniciativa que se atrevan a desafiar el status quo. Sin embargo, si hay un empleado que le pone contra a TODO y siempre está discutiendo con sus compañeros, jefes, contigo, o peor todavía, los clientes, entonces te arriesgas a que estalle de maneras desagradables. Este tipo de comportamiento no solo da miedo, también genera un mal ambiente de trabajo. Para ponerlo de manera simple: esa persona se tiene que ir antes de que alguien salga lastimado.
6. No tratan de mejorar
Digamos que tienes un empleado impuntual o que teme hablar en público (lo cual es válido). En lugar de hacer un esfuerzo por llegar más temprano o tomar clases para vencer su timidez, sigue repitiendo la conducta. Si no quiere hacer un esfuerzo por mejorar, entonces no lo necesitas en tu negocio.
7. Es un “ocupa-plaza”
Lo entiendo. Cuando arrancaste tu negocio necesitaste contratar lo más rápido posible y traes amigos, familiares, al “primo de un compadre”, etcétera, para llenar esas plazas. Si tienen las habilidades que necesitas, fenomenal, tienes un buen empleado y diste trabajo a un ser querido. Pero si no las tienen o carecen de lo necesario para llevar tu negocio al siguiente nivel, entonces esa persona solo es un “ocupa – plaza”, alguien que tiene un trabajo “mientras tanto”.
Lo sé. Despedir a alguien en esta posición es difícil porque no tiene que ver con su ética laboral o su personalidad. Tal vez puedas reubicarlos o ayudarlos a desvincularse con éxito para que se coloquen en otro lugar con prontitud.
8. Tus clientes se quejan de él
¿Sabías que el 86% de los consumidores dejan de ir a un negocio si experimentan mal servicio al cliente? Aun más alarmante es el hecho de que cada persona que tiene una mala experiencia se lo contará a entre 9 y 15 personas más. En otras palabras, debes mantener a tus clientes felices. Si has recibido quejas sobre un empleado de parte de tus compradores entonces debes despedirlo. ¿Quién quiere hacer negocios con una empresa con empleados groseros o apáticos?